Orann es una empresa orientada a la elaboración artesanal de productos alimenticios naturales sin conservantes químicos, que surgió hace más de 20 años a partir de un micro emprendimiento familiar.

Nos dedicamos a la elaboración de alimentos naturales a base de cereales, semillas, frutas secas y deshidratadas. Producimos diariamente una gran variedad de granolas, barritas de cereales y de semillas.

En la fabricación de nuestros productos no utilizamos ningún ingrediente de origen animal, como tampoco: colorantes, conservantes químicos, agregados de azúcar, o resaltadores de sabor.

Cada producto contiene únicamente la materia prima indicada en su rótulo, la cual pasa por un riguroso control de calidad.

Esta es la clave por la cual nuestros productos son una opción naturalmente sana.

En los años noventa era muy difícil conseguir en el mercado alimentos más saludables y libres de aditivos y conservantes.
Así, en principio como una búsqueda y una necesidad personal, nace nuestra primera granola…
Luego las primeras golosinas…
Y ya, en aquellos años, apareció de la mano de una necesidad, una incipiente demanda de un particular mercado que comenzaba y consolidaba día a día (Las Dietéticas).
Así, con trabajo y más trabajo, vinculando siempre acción/reflexión y aprendizaje… en medio del armado de una historia de pareja, nace Orann…
Y con los años, varios años, Orann se transforma en PYME.
Ya no sólo están nuestras propias manos amasando, mezclando… envolviendo.
Se suman otras manos, otras personas, otras familias.
La cocina y el balcón del inicio necesitaron más espacio: primero en un pequeño galpón en el fondo de una casa, luego a uno más grande en un terreno vecino…
Y creció, se desarrolló y hoy es nuestra Planta Elaboradora que alberga más de veinte trabajadores.
Recibimos cantidades de variada materia prima… quizá con historias similares. Ser parte de este círculo virtuoso (tener y dar trabajo) nos entusiasma y nos genera una alegría inmensa.
Ya pasaron más de 30 años. Y todavía estamos. Con las mismas ganas y los mismos cimientos.         
Y seguros ya, que la primera solución siempre:                                                                                              
                                                                          Es el trabajo, los principios y la constancia.